Como padres, siempre estamos atentos al crecimiento y desarrollo de nuestros hijos. Sin embargo, a veces pueden surgir dudas sobre si están alcanzando los hitos adecuados o si necesitan apoyo adicional. La terapia ocupacional es una herramienta poderosa para ayudar a los niños a superar desafíos y mejorar su calidad de vida. A continuación, te mostramos cinco señales que podrían indicar que tu hijo necesita terapia ocupacional.
¿Qué observar?: Si tu hijo tiene problemas para realizar tareas que requieren movimientos precisos, como abotonarse la ropa, usar utensilios para comer, o manipular lápices y tijeras, podría ser una señal de que necesita ayuda.
Cómo ayuda la terapia ocupacional: Un terapeuta ocupacional trabajará con tu hijo para mejorar la destreza manual y la coordinación, ayudándole a realizar estas tareas cotidianas de manera más independiente.
¿Qué observar?: Dificultades para correr, saltar, mantener el equilibrio o participar en juegos físicos pueden ser indicadores de un problema en la motricidad gruesa.
Cómo ayuda la terapia ocupacional: A través de ejercicios y actividades, el terapeuta puede mejorar la fuerza, equilibrio y coordinación de tu hijo, facilitando su participación en actividades físicas.
Si has identificado una o más de estas señales en tu hijo, no lo dejes pasar. La intervención temprana a través de la terapia ocupacional puede hacer una gran diferencia en su desarrollo y calidad de vida. Agenda una valoración personalizada con nuestros especialistas para determinar el mejor enfoque para ayudar a tu hijo a alcanzar su máximo potencial.